El escritor hispano-argentino habla con Cervantes TV acerca del valor del español en lo personal y en lo profesional, algo que para los escritores tiende a confundirse, porque el idioma no solamente es algo con lo que trabajar sino que está implicado en la peripecia vital de cada uno. Las palabras que Neuman escogería para hablar de su oficio y de su vida serían: ritmo —el ritmo de la sintaxis, de escribir, y también de respirar— y frontera —puesto que su vida ha transcurrido entre la Argentina y España y además ha cultivado varios géneros literarios en su trabajo—. El escritor no cree que haya una lengua materna que abarque tantos países como el español y piensa que, en términos políticos, es una situación extraña la de una lengua que es hegemónica, pero que a la vez es hablada en países que no son grandes potencias. Es decir, que es un idioma central y periférico a la vez.